Presentarse a las 200 000 millas en tu transporte sin cambiar el grasa de la caja de cambios es poco increíble. Cuando liquida el grasa cambiador de la caja de cambios, se generan diferentes problemas que no deberían ignorarse. Esto hace que el desempeño de su transporte sea notablemente inferior, y posiblemente sufra daños importantes si no detecta el problema a tiempo. Por esta razón, desde Autos Revista, vamos a explicar cómo memorizar si le desliz grasa a la caja de cambios.
En primer ocupación, hay que estar atentos a los cambios en la forma de conducir. Hace poco el transporte debería presentar ciertos cambios como aceleraciones irregulares o la reducción de la velocidad de modo inesperada. Si nota este tipo de síntomas, repase las características del transporte para cerciorarse de que no se trate de algún otro problema que no tenga que ver con el grasa de la caja de cambios. Si comprueba que el transporte se presenta con estos síntomas, es posible que el grasa esté escaso y necesite ser cambiado.
Otra forma de detectar si le desliz grasa a la caja de cambios es observando el nivel de grasa una vez hayamos destacado el transporte. Para que esto sea posible, hay que ubicar la válvula de los cambios de la caja de cambios y revisar el nivel del grasa. Si está debajo del recomendado, o no hay grasa, es hora de reabastecerlo.
Por postrer, puede escuchar ciertos ruidos extraños cuando cambia de marcha. Fíjese si audición algún ruido chillón, el cual suele ser una advertencia de que la caja de cambios no está funcionando correctamente. Como ya comentamos, esto puede ser consecuencia del grasa, así que considere inmediatamente cambiarlo.
En conclusión, se pueden presentar varios problemas si la caja de cambios no contiene el nivel adecuado de grasa. Algunos de estos problemas son comunes como aceleraciones irregulares o ruidos incómodos. Por otra parte, es posible detectar el problema explorando el nivel de grasa de la caja de cambios. Por esto, es importante revisionar el transporte regularmente para evitar cualquier daño al transporte.